La Universidad de McGill, en Montreal, analizó los efectos de la «música conmovedora» en el cuerpo humano y particularmente su capacidad de reducir el dolor y el estrés.
El estudio publicado en 2023 en la revista ‘Fronteras de la Investigación sobre el Dolor’ contó con la participación de 63 personas sanas y los investigadores canadienses descubrieron que escuchar música emocional, conmovedora o que tenga un significado especial puede ser un analgésico potente.
Desde hace muchos años la ciencia viene estudiando el efecto de la música en el cuerpo humano. En esta oportunidad se centraron en la capacidad de disminuir en dolor que tienen las canciones que «nos hacen llorar de emoción» o nos «erizan la piel».
Sabías qué…
Según varios estudios la música es «hipoalgésica», es decir que puede disminuir la sensibilidad a los estímulos dolorosos. Se ha comprobado que mejora notablemente el dolor en pacientes con enfermedades crónicas, en etapas postoperarias e incluso en los bebés para aliviar el malestar después de las vacunas.
“Encontramos pruebas sugestivas de que la música favorita, conmovedora y agridulce reduce el malestar por el dolor a través de un aumento del agrado musical”, Investigadores de la Universidad de McGill.
¿Cómo se hizo el estudio?
- A los 63 participantes se les puso un dispositivo que generaba calor en su brazo. La sensación era similar a la que produce una taza de café caliente al ser presionada sobre tu piel.
- Mientras recibían este estímulo y por intervalos de 7 minutos, se les puso música seleccionada por los investigadores especialmente para ellos, silencio, sus dos canciones favoritas o música aleatoria.
- Mientras escuchaban, los participantes describían y calificaban la intensidad o la incomodidad del dolor.
- Al finalizar, se les pidió describir en categorías el tipo de música que escucharon, explicar su respuesta emocional y decir si esta les había producido escalofríos.
¿Qué descubrieron?
- Los resultados obtenidos demuestran que escuchar nuestra música favorita puede ayudarnos a la reducir considerablemente la intensidad del dolor. Además explican que su efecto es diferente a si escucháramos música relajante genérica o desconocida.
- El estudio indica que la música que escogemos como favorita funciona mejor dado a que el efecto de «hipoalgesia» está relacionado con las respuestas emocionales que cierta música nos produce.
- En cuanto a las temáticas de la música, el estudio encontró que si existe una diferencia de los efectos que causan. La música conmovedora parece ser mejor para mitigar el dolor dado que el proceso neurológico que esto involucra es más inteso y es el responsable de bloquear los estímulos dolorosos.
En una entrevista de Darius Valevicius, primer autor de la investigación, a The Guardian explica que encontraron «una correlación muy fuerte entre lo agradable de la música y lo desagradable del dolor. Pero una correlación nula entre lo agradable de la música y la intensidad del dolor, lo que sería un hallazgo improbable si se tratara únicamente de efectos placebo o de expectativas».
Según Valevicius la diferencia en el efecto sobre la intensidad del dolor implica dos mecanismos:
- Los escalofríos pueden tener un efecto fisiológico de bloqueo sensorial, bloqueando las señales ascendentes del dolor.
- Mientras que lo agradable puede afectar al valor emocional del dolor sin afectar a la sensación, por lo que se produce más a un nivel cognitivo-emocional en el que intervienen áreas cerebrales prefrontales.
